Nuestro Capitán entró en el salón. La flor y nata de Isla Tortuga aguardaba reunida y todos mostraban un semblante serio y preocupado.
Una esclava le sirvió ron del barril que guardaban para las ocasiones más significativas, pero en esta ocasión no pensaban celebrar nada. Al contrario, el nerviosismo que mostraban algunos de los capitanes era más propio de una ejecución que el tono distendido que solía acompañar a aquellas reuniones.
«Esta mañana, hemos perdido otros dos navíos. Y ya van siete en esta semana. Tenemos que poner fin a esto, antes de que toda la Cofradía caiga presa de esa maldita bestia.- Habló uno de los consejeros de la cofradía.»
Nuestro capitán se acercó hasta la copa de ron que reposaba en la mesa principal, la alzó hasta sus labios y de un trago dio buena cuenta de aquel delicioso elixir.
«No se hable más. Mi tripulación y yo nos encargaremos de esa maldita ballena del demonio, o moriremos en el intento. ¡Que Davy Jones se nutra de nuestras almas si fracasamos en esta empresa!»
Otra semana más. queremos compartir con nuestra tripulación favorita algunas de las novedades que nos trae Skull Tales ¡A Toda Vela!
En esta ocasión, os traemos las cartas de Encargo y Rumores.
Las cartas de Encargo son misiones que recaen sobre el Capitán, y que podrá adquirir en la fase de Puerto para ponerlas en juego en la fase de Travesía. Pueden ir desde el traslado de mercancías de una isla a otra, hasta la captura de un barco o el enfrentamiento con alguna bestia marina.
Otorgan prestigio y botín si el capitán cumple el objetivo, pero también puede traerte deshonra si incumples lo acordado.
Las cartas de Rumores, en cambio, son misiones secundarias para todos los jugadores. Se pueden adquirir en la Cantina, aunque en la Mansión de Madame Claude son más sencillas de conseguir.
El pirata que acepte un Rumor, deberá llevarlo a cabo durante la fase de Aventura, y podrá obtener diferentes tipos de beneficio si cumple el objetivo de la carta, pero también puede recibir alguna penalización en el caso de no conseguirlo.
Seguimos navegando a toda vela, y muy pronto volveremos a vernos las caras, queridos grumetes. Os esperamos a bordo de nuestro barco, si os atrevéis a vivir las aventuras más peligrosas del Caribe.
[David Illescas]
